Crystal llegó a nosotros en una tarde de domingo durante una de nuestras jornadas de puertas abiertas y estaba tan flaca que algunos de los visitantes lloraron al verla.
Ella fue localizada en Guadalest, cerca de Benidorm, por una mujer alemana que la compró para salvar su vida y la trajo para ponerla a salvo en nuestro centro de rescate. Tendría alrededor de 20 años.
De hecho Crystal llegó con su pasaporte oficial de caballos y pronto descubrimos que ella tiene una excelente línea de sangre, es más, debe haber costado una fortuna como yegua de cría, pero sus dueños decidieron dejar de alimentarla con el azote de la crisis económica española.
Al principio, Crystal era muy antisocial. Era como si se encerrara en sí misma apartada de todos, cosa que hemos visto incontables veces en caballos rescatados. Cuando han pasado mucha hambre y han sido maltratados, parece que adoptan un mecanismo de supervivencia.
Le dimos su espacio y la dejamos que fuera ella misma, sin forzarla a nada. Fue una grata sorpresa, que tan solo en un año, dejó salir el maravilloso carácter que tiene ahora.
Crystal estableció en seguida una relación con Arisco y ambos fueron inseparables hasta el día en que Arisco falleció en abril del 2014.
Crystal, afligida por la muerte de Arisco, entró en una terrible depresión – hasta que la pusimos con Captain. Ahora son inseparables. Captain y Crystal pasean por los caminos de nuestros campos durante el día y vienen juntos a los establos por la noche. Ellos nunca se separan, lo que demuestra las profundas relaciones que estos animales son capaces de formar.
A principios de 2016, Crystal tuvo que someterse dos veces a una cirugía a causa del cáncer y también recibió tratamiento de quimioterapia. Estábamos profundamente aliviados de ver que se había curado en abril de 2016.
Crystal era fundamental en nuestros días de puertas abiertas y quería conocer a todo el mundo. Amaba la vida y fue maravilloso poder presenciar su transformación de la criatura triste y esquelética que llegó a nuestro centro a esa hermosa y sociable en la que se había convertido.
Lamentablemente, en julio de 2017 Crystal cayó muy enferma. Al principio pensamos que estaba sufriendo un caso de laminitis provocada por el estrés – habíamos estado permitiendo que nuestro caballo Captain de 30 años de edad estuviese libre fuera de nuestras caballerizas y se habían hecho inseparables. Crystal estaba triste al ver que su amigo ya no estaba a su lado!
Sin embargo, el 3 de agosto, las cosas tomaron un giro importante para peor. Nuestro veterinaria Dorothea comenzó a considerar el hecho de que Crystal puede tener Motor Neurone Disease, una enfermedad rara en equinos; y Crystal empeoró rápidamente. Pensamos en llevarla al hospital de caballos de Alicante, pero su salud se estaba deteriorando muy rápidamente y pronto se hizo evidente que no iba a mejorar.
Así que, a las 15:15, tomamos la difícil decisión de acabar con su dolor y «ponerla a dormir». Sus amigos Captain y la tía Rosie estaban con ella y pensamos que Captain realmente sabía lo que estaba sucediendo – después él y Rosie caminaron juntos y Rosie se ha mudado ahora en el establo de Crystal.