Prince
Rescate: 19 de agosto del 2017
Una mañana de verano, la policía local de Almoradí nos llamó para que fuéramos a recoger un poni abandonado que habían encontrado deambulando por las calles del pueblo.
Como en España no suele haber instalaciones para albergar equinos abandonados, la policía encerró al poni en una de sus jaulas para perros dentro de la propia comisaría. Incluso utilizaron cinta policial a modo de cabezada para poder llevárselo a la estación.
Como podéis imaginar, estaban ansiosos por que nos llevásemos al pequeño y descarado poni cuanto antes, puesto que estaba armando un escándalo tremendo.
Cuando lo rescatamos tendría unos 8 años, y decidimos llamarlo Prince. Uno de nuestros voluntarios fue quien propuso el nombre, ya que su flequillo a lo afro le recordaba al difunto cantante americano.
Cuando nuestra veterinaria equina Dorothea Dudli von Dewitz lo vio por primera vez, se dio cuenta enseguida de que, en algún momento de su vida, Prince había sufrido un golpe en el ojo que, a su vez, le había producido una grave hemorragia que no llegó a curarse bien. Por ese motivo, en la actualidad, su ojo se encuentra recubierto de una gruesa capa de tejido, lo cual le impide ver bien. Por suerte, no siente dolor.
Está claro que nunca conoceremos la verdadera historia de Prince, pero su comportamiento nos aporta algunos datos sobre su pasado. Es un poni muy nervioso y desconfiado, y a veces intenta morder. Es obvio que en su día le dieron fuertes palizas.
Prince presenta una mala conformación, fruto seguramente de una cría irresponsable. Además, tiene inflamada la babilla. Las radiografías y ecografías revelaron malformaciones en las rótulas de sus patas traseras que le impiden bloquear la babilla. Los caballos normalmente pueden bloquear sus articulaciones, lo que les permite dormir y descansar de pie. Pero Prince no puede hacerlo, y se tiene que mantener erguido de forma consciente.
Por ello, sus “rodillas” (babillas) realizan un trabajo excesivo, lo que provoca el desgaste de las mismas. No sabemos qué problemas le ocasionará esto a largo plazo, pero por ahora el animal se encuentra estable.
Con mucho tiempo, amor y cuidados, esperamos que vuelva a confiar en las personas.