Ruppert
Rescate: Junio del 2019

En junio de 2019, nuestro centro de rescate tuvo un visitante inesperado: un pequeño lechón llamado Ruppert, que milagrosamente escapó del terreno de un vecino en nuestra comunidad, aparentemente con la misión de rescatarse a sí mismo. La situación tomó un giro desgarrador cuando el dueño lo reclamó de vuelta con la intención de criarlo para carne en condiciones menos que ideales.

Ante el dilema de dejar que Ruppert regresara a su destino, una voluntaria compasiva intervino, decidiendo comprar al cerdo para asegurarse de que pudiera quedarse en el centro de rescate y disfrutar de la mejor vida posible. Aunque normalmente nos mostramos reacios a contribuir con fondos para aquellos con intenciones cuestionables, la urgencia de la situación no nos dejó otra alternativa.

Ruppert ha crecido personificando la alegría que proviene de una vida libre de daño. Es lamentable que solo unos pocos cerdos tengan la oportunidad de experimentar tal felicidad. En un mundo donde millones enfrentan destinos menos afortunados, la historia de Ruppert se erige como un faro de esperanza.

Para honrar a nuestro cerdito, se compuso e interpretó una canción humorística, reminiscente de Fred Scuttle de Benny Hill, por el talentoso Paul Gee.

Ruppert, el cerdo que se rescató a sí mismo, se ha convertido en un gigante de 300 kilos y sigue llevando amor y risas a nuestro santuario. Aspiramos a que su historia sirva como un catalizador, remodelando las percepciones sobre los cerdos y fomentando una mayor consideración hacia estos seres notables.

Puedes ayudarnos a mejorar significativamente la vida de un animal rescatado amadrinándole con tan solo 5€ al mes (o la moneda que elijas).
keyboard_arrow_up