Sancho Panza
Rescate: 12 de abril del 2013
A veces las cosas son como deben de ser. Como un pollino hambriento encontró su camino hasta nuestro refugio, vía un centro de adiestramiento canino y un par de voluntarios de gran corazón.
El adiestrador de perros Rubén estaba paseando cerca de Los Montesinos en 2013 cuando divisó algo muy raro, un amable pero terriblemente delgado joven burro buscando algo, podría haber sido comida, amigos o a su madre, nunca lo sabremos.
Este chico tan dulce tenía solo siete meses y supuestamente había sido el acompañante de un pastor, el cual solía pastar sus ovejas y cabras en el área de Los Montesinos. Cuando el pastor decidió que no necesitaba al joven burro nunca más, simplemente lo abandonó.
Con el conocimiento de que este burro no tenía a donde ir, Rubén lo cargó en la parte trasera de su coche y se lo llevó a su centro de adiestramiento canino, donde le dio agua, comida y un techo. En seguida ambos se convirtieron en buenos amigos y Rubén decidió llamarlo Sancho Panza.
Sancho Panza es un personaje de ficción de la novela Don Quijote de la Mancha de 1605, escrita por Miguel de Cervantes Saavedra. Sancho es el escudero de Don Quijote, un personaje muy divertido, humilde y trabajador.
En tan solo unos días nuestro burro se convirtió en una versión de “escudero” de Rubén. Sancho adora la compañía tanto de humanos como de perros y era tan amigable que incluso algunos de los dueños de los perros se encariñaron con él y lo cuidaron como a uno más del equipo.
Pero después de varias semanas las cosas empeoraron rápidamente.
El casero de Rubén le informó que Sancho no podía permanecer en el centro de adiestramiento y que tenía solo unos días para encontrar una nueva casa para el burro.
Fue entonces cuando Kate Cammish se enteró de que Sancho iba a ser desahuciado. Kate, la cual tenía una gran debilidad por este noble burro, incluso consideró excavar la terraza de su jardín trasero para darle un hogar, ya que ella quería asegurar el bienestar de Sancho en el futuro.
Afortunadamente cuando Kate se lo contó a su amiga Sandra Gelbke una solución más factible se hizo realidad. Sandra sabía sobre Easy Horse Care Rescue Centre y le recomendó a Rubén que nos llamara. Así que al día siguiente conocimos a Rubén y a Sancho.
Fue una gran sorpresa, y un gran alivio, encontrar a Sancho en unas condiciones perfectas y con un ánimo excelente. Durante el tiempo que estuvo en el centro de adiestramiento canino obviamente se había recuperado y fortalecido del lamentable estado en que se encontró. También tuvo la oportunidad de recuperar su ánimo y disfrutar de nuevo de la compañía humana. Había crecido y se había convertido en una criatura pequeña y divertida que incluso hoy en día, cree que es un humano.
Decirle adiós fue muy duro para Rubén, el cuido a Sancho de corazón y dejarlo marchar significó perder a su caballero de confianza.
Cuando llegó a nuestro refugio nuestra veterinaria Dorothea le realizó un chequeo a Sancho y felizmente encontró que, aparte de que tenía que ser desparasitado, estaba en buen estado de salud, pero sus cascos necesitaban ser recortados lo antes posible, ya que era obvio que nunca se habían tocado y si se dejaban podían afectar al desarrollo de sus articulaciones.
Nunca sabremos mucho más sobre la vida de Sancho antes de Rubén, pero era muy joven cuando el adiestrador de perros lo encontró, así que asumimos que pasó muy poco tiempo con su madre. Esto puede explicar por qué este guapo compañero prefiere pasar todo el día con humanos en vez de con otros burros, ¡parece no darse cuenta que es un equino!
Tres meses después de que Sancho Panza llegara a nuestro centro, otro burro fue rescatado. Él tiene el pelo blanquecino (bueno, tiene el pelo marrón con preciosos manchones blancos) le encantan las aventuras y le encanta la avena con locura, así que por supuesto le tuvimos que llamar Donkey Oaty (burro de avena), él es el Don Quijote de nuestro Sancho Panza.
Hoy en día a Sancho le encanta estar involucrado en absolutamente todo. Le encanta “ayudar” a nuestros voluntarios cuando lavan los cubos de la comida y a menudo hace que Rod le prepare la cena el primero: si se atreve a ignorarlo empezará a correr por todos los cubos de comida, tirándolos todos hasta que lo alimenten.
También le encanta desatar los cordones de los zapatos de cualquiera que esté cerca de él. Y a menudo se sale del prado de los burros para visitar a nuestros caballos más grandes Bronte y Akim, o para robar un poco de heno y alfalfa de nuestro cobertizo para la comida, nos gusta llamarle nuestro “burro en libertad”.
Sancho tiene un carácter maravilloso, un pequeño compañero excéntrico el cual nunca nos falla haciendo a todos los que estamos a su alrededor reír. Sancho es una verdadera delicia.