Sirius
Rescate: 24 de noviembre del 2016
Fallecimiento: 26 de agosto del 2021
A finales de una tarde de otoño, dimos la bienvenida a una nueva alma en pena en nuestro refugio: un caballo extremadamente delgado de 25 años, cuyos dientes estaban en tan mal estado que apenas podía comer.
Encontramos a Sirius en un descampado situado en la carretera que lleva a nuestro refugio. Lo habíamos estado observando durante todo el verano, viendo cómo adelgazaba día tras día.
Finalmente, conseguimos contactar con una señora holandesa muy amable que acudía regularmente a dar de comer al viejo animal. Ella accedió a comprarle el caballo a su dueño, con el fin de poder salvarle la vida. Esto es algo que habitualmente no hacemos, pero en este caso fue absolutamente necesario. No podemos contaros todos los detalles por motivos de privacidad pero, digamos que esto era lo mejor que podíamos hacer. Reubicamos al resto de caballos para hacerle un hueco a nuestro nuevo amigo en nuestras cuadras.
En ese momento, nos dimos cuenta de que el caballo tenía algo de tos.
Cuando a la mañana siguiente nuestro veterinario equino acudió a nuestras instalaciones para realizarle un chequeo, se confirmaban nuestros peores temores: Sirius padecía de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, un problema respiratorio generalmente provocado por estabular a los caballos en lugares polvorientos y por alimentarlos con forraje con mucho polvo.
Sospechamos que ese fue el motivo de su abandono y de su llegada al descampado al lado de nuestro refugio.
Al tratarse de un caballo viejo que ya no se puede montar, parecía carecer de todo valor. Inicialmente, en el descampado había un montón de hierba para comer, pero una vez que se terminó, nadie parecía preocuparse por llevarle más comida.
Debido a su pasado y a su condición física, Sirius necesitaba un extra de cuidados y cariño. Necesitabe vivir permanentemente en el exterior, en un lugar que no sea demasiado polvoriento.
No podía comer forraje seco, ya que el polvo empeoraba su problema respiratorio. Por ello, tanto la alfalfa como el Fast Fibre se tenían que humedecer antes de dárselos para comer. También requería un tratamiento con esteroides diario, con el fin de ayudar a mantener sus vías respiratorias abiertas.
Con los cuidados y el cariño apropiados,a este caballo aún le quedaban varios años por delante. Era un caballo mayor absolutamente adorable y le echamos de menos.